Si tienes una idea de cómo son los actuales cuadros de relojes de Opel, ve dándola por anticuada: la marca alemana va a cambiar de forma radical su apariencia aprovechando su digitalización.

El nuevo concepto de diseño se llama Opel Pure Panel y consiste en dos pantallas digitales de formato muy ancho que se estrenarán en el próximo Opel Mokka, pero que más adelante se irá incorporando a otros futuros modelos.

Al estar unidas, una de las pantallas sirve de cuadro de relojes y la otra ejerce de pantalla central de infoentretenimiento, y ambas se integran en un salpicadero que, por lo visto en el boceto, va a ser rectilíneo, muy horizontal y todo lo minimalista que se pueda.

Según Mark Adams, vicepresidente de diseño de Opel, «las pantallas grandes, perfectamente integradas en un formato de información horizontal, una cantidad mínima de controles físicos y una información digital clara y desintoxicada, crean una experiencia optimizada para el cliente».

En la marca alemana afirman que el Opel Pure Panel tendrá un funcionamiento muy intuitivo y no nos obligará a navegar en submenús. También aseguran que no habrá «ningún estímulo visual irritante» al visualizar, por ejemplo, la gestión de la energía de la batería en el próximo Mokka eléctrico. Pero también dejan clara una cosa: seguirá habiendo botones y controles físicos, solo que estarán mucho más reducidos.