Con las formas y dimensiones de un SUV compacto, se podría decir que el nuevo Mercedes-Benz EQA es la versión eléctrica del GLA, el modelo de acceso a la gama SUV de Mercedes. Si el parecido salta a la vista inmediatamente, al comprobar las medidas exteriores se despeja cualquier tipo de duda. Aunque es 5 centímetros más largo (4.463 mm) y 1 centímetro más alto (1.620 mm) que el SUV de combustión, la anchura (1.834 mm) y la distancia entre ejes (2.729 mm) son exactamente las mismas.
Pero una cosa es la forma y otra muy distinta el diseño, en el que sí se aprecian ligeras diferencias con el GLA. La estrella de Mercedes preside la parrilla negra completamente cerrada y una banda luminosa horizontal une las luces diurnas de los dos faros LED, salpicados con franjas de color azul. La misma banda luminosa la encontramos detrás, uniendo las ópticas traseras LED, lo que permite reconocer el vehículo desde lejos.
Los faldones delantero y trasero también han sido rediseñados para reducir la resistencia aerodinámica, mientras que los bajos (aunque no se ven a simple vista) son lisos y están cerrados casi por completo. Las llantas de aleación de hasta 20 pulgadas, en diseño bicolor o tricolor, son exclusivas del modelo eléctrico y están optimizadas aerodinámicamente, igual que los spoilers de las ruedas.
El primer modelo que saldrá al mercado es el EQA 250, con una potencia de 140 kW (188 CV) y un par máximo de 375 Nm transmitidos al eje delantero, lo que le otorga unas prestaciones excepcionales para un SUV de casi dos toneladas de peso: 8,9 segundos en el ‘sprint’ de 0-100 km/h y una velocidad máxima de 160 km/h limitada electrónicamente. Con un consumo de 15,7 kWh/100 km en ciclo combinado, la batería de ion-litio de 66,5 kWh le permite alcanzar una autonomía de 426 kilómetros, según datos de Mercedes.
Según el fabricante alemán, la batería de doble piso (integrada como elemento estructural en los bajos del vehículo) se recarga en 5 horas y 45 minutos en un cargador wallbox o en un punto de carga pública de al menos 11 kW. En una estación de carga rápida de 110 kW, el tiempo de carga (del 10 al 80%) se reduce a media hora.
El segundo SUV eléctrico de Mercedes, después del EQC (más grande y lujoso), llegará a los concesionarios en la primavera de 2021, pero aún no se ha confirmado el precio que tendrá en el mercado español. El precio oficial en Alemania es de 47.540 euros -con un 2% menos de IVA que en España-, por lo que se espera que ronde los 49.000 euros en nuestro país.
Más adelante le seguirán otras variantes con tracción a las cuatro ruedas y un nivel de potencia más allá de 200 kW (268 CV), además de una versión con una autonomía de más de 500 kilómetros.